El desarrollo tecnológico ha propiciado nuevas formas de interaccionar con otras personas y con los modernos dispositivos. Además, la demanda laboral de dedicación ininterrumpida en los procesos de fabricación industrial, y en los servicios sanitarios y de protección ciudadana en nuestra sociedad 24/7, suponen un cambio drástico en las organizaciones hacia modelos de horarios basados en el trabajo por turnos.