Teherán, mediados del siglo XIX. Mientras la corte del Sha atraviesa momentos convulsos por conjuras e intrigas del palacio, las ideas de una mujer, consideradas heréticas y subversivas, recorren el país como la pólvora. La poetisa y teóloga iraní Tahirih Qurratu'L-Ayn fue la priemra en su época y en su país que proclamó la dignidad femenina y defendió la alfabetización de las mujeres y la libertad de elección sobre el velo.