Escuchamos los ecos del violín del oso Paco… el sonido de sus cuerdas y notas juguetonas nos transporta a sagrados territorios, donde seguimos habitando. Como buen ciudadano del mundo, el oso Paco reconoce el valor de nuestra mitología, y nos invita, junto con sus amigos, a redescubrir y a disfrutar nuestra historia.