William Vega, en los hombre de Rahel, nos regala una trama de historias de vida, como la suya o la mía: reales, con claridades y contradicciones, amores y desamores, sueños y frustraciones, en medio de la historia de un paso que si por un lado no para de llorar a sus muertos, tampoco deja de celebrar la vida, y ahí está la mujer, revelando sus múltiples facetas en medio de la incertidumbre, arrastrando aún las cargas ancestrales de la dominación masculina, a la vez que se sacude en la intimidad de su cuerpo, su mente y su alma, para emanciparse a si misma. Una novela corta, descriptiva, con una vibrante narrativa que evoca diferentes momentos de la vida nacional.