La adaptación de los procesos de mejoramiento continuo de la productividad exige una fuerza laboral de calidad, es decir, altamente motivada y entrenada. No importa lo que la alta gerencia decida, los resultados no serán los deseables sin la excelencia humana de sus colaboradores. Pero sucede que la calidad humana no se puede importar, sino que tiene que ser producida en la misma empresa, mediante una Gestión de Personal avanzada. El propósito de la Administración de Personal moderna es crear las condiciones en las cuales se pueda desarrollar el máximo potencial laboral de la gente y en consecuencia posibilitar los enfoques empresariales capaces de atender las exigencias del mercado.