Los pastos constituyen la base para la producción animal en el trópico y si estos recursos son bien aprovechados es posible aumentar la producción ganadera en la granja. Para lograr este objetivo es necesario implementar sistemas de alimentación que garanticen reservas para épocas de verano y que además sean nutritivos. La henificación es una buena alternativa para mejorar la calidad nutricional de los forrajes y consiste en secar o deshidratar el material vegetal hasta que contenga aproximadamente un 20 ó un 25 % de humedad, de esta forma se incrementa la cantidad de materia seca, es decir, los nutrientes presentes en los forrajes y a la vez ayuda al desarrollo y correcto funcionamiento del rumen debido a su alta digestibilidad