A partir de la metodología y propuesta planteada frente a la sensibilización y fomentación de la cultural del personal se reconoció que no es fácil humanizar la asistencia, puesto que no basta solo con la voluntad de prestar un buen servicio de calidad, sino que sería fundamental un nuevo replanteamiento y organización para seguirlo, ya que lo que se puso evidenciar es que la parte de la humanización viene desde lo administrativo. Se ha identificado falencias en el desarrollo de prácticas humanizadas en los Servicios, por lo que se hace importante fortalecer la confianza mutua entre los pacientes y el personal médico, quienes deben fortalecer una serie de actitudes, conocimientos, competencias, motivaciones y capacidades para realizar sus funciones diarias y afrontar momentos de crisis, sin perder de lado el respeto por el paciente y su familia.