La investigación narrativa se encuentra necesariamente atravesada por la disputa acerca del sentido de lo que es investigar
y lo que puede y debe esperarse de esta empresa. Si bien su legitimidad epistémica y su uso asiduo en el estudio de la educación han ido creciendo proporcionalmente, su validez metodológica sigue despertando inquietudes que remiten no solo a cuestionamientos técnicos, sino que también arrastran posturas políticas respecto de la naturaleza de la realidad, el lugar de los sujetos en el devenir de la experiencia humana y el poder de la práctica científica en el juego de las construcciones de sentido. Este trabajo se aboca al análisis del estado de la cuestión en el contexto geográfico inmediato y su marco geopolítico más general y sostiene las preguntas respecto de las consecuencias políticas de la investigación narrativa. Comparte, simismo, retazos narrativos de profesores entrevistados en la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP) al l intentar dar cuenta de la buena enseñanza, como modo de ilustrar la potencia política de este tipo de indagaciones.