CONTENIDO: Naturaleza artificial. Que el lenguaje de la geometría escribe el libro de la naturaleza lo intuían ya los antiguos, pero que la arquitectura redacta el de la biología plantea nuevas perspectivas sobre el orden matemático y la forma de jerarquizar el mundo, tanto a las grandes escalas como a las diminutas; la tensegridad, término acuñado por Buckminster Fuller tras conocer los trabajos pioneros de Kenneth Snelson, se traslada de las esculturas a las construcciones, y se puede aplicar también a los organismos e incluso a las células, presentándose como el penúltimo elemento de la superorganización biológica.
Construcción en verde. Cuanto más lejos de la naturaleza, más cerca queremos estar de ella. Aquí, doce obras persiguen un mismo objetivo, transformar espacios artificiales en naturales: un museo en San Francisco ofrece un manifiesto sostenible; un jardín botánico en Fukuoka recrea un paisaje orgánico; unas oficinas en Frankfurt incorporan jardines a los despachos; un dosel en Medellín esboza una plantación floral; un paseo termal chileno se adapta a una quebrada; un café en Hanoi reivindica el bambú; diez prismas japoneses sirven como jardineras y residencia; una casa en Nîmes oculta sus límites con la vegetación, un refugio estival en Bombay se incorpora a un palmeral; una pasarela en Londres se eleva hasta las copas de los árboles; un aseo en Austin se camufla en el parque; y una tumba crea un evocador lugar en Piribebuy.
Tomado de : http://www.arquitecturaviva.com/es/Shop/Issue/Details/269